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Grease: Rise of the Pink Ladies: una precuela innecesaria sin gracia ni ritmo
Hablamos de uno de los grandes estrenos recientes de Skyshowtime
Las chicas rebeldes de la escuela Rydell encuentran su historia de origen en Grease: Rise of the Pink Ladies, una nueva miniserie de la plataforma SkyShowtime que presenta crítica social, números musicales y un reparto de estrellas emergentes para una nueva generación de espectadores. Los primeros capítulos ya están disponibles para su visionado y los restantes llegarán de manera semanal.
Sinopsis de Grease: Rise of the Pink Ladies
En 1954, cuatro chicas marginadas se unen y desafían la moral social en el instituto Rydell decididas a divertirse a su manera en una nueva era de coches rápidos, pelo engominado y rock and roll. Precuela del clásico musical de 1978.
Crítica de Grease: Rise of the Pink Ladies
La nostalgia y la popularidad de Grease 1978 son la base sobre la que se concibe esta precuela musical que explora temas como la sororidad y la idiosincrasia de los años 50 a través de una óptica contemporánea que impregna cada escena y termina por hundir en tierra de nadie a una producción que se siente fallida desde sus primeros compases.
Una miniserie en donde nada parece funcionar
Los problemas comienzan con el tono irregular que adopta la miniserie a medio camino entre la comedia nostálgica y la sátira de una época pasada. En ningún momento hay espacio para la risa honesta y los intentos de generar empatía con los espectadores modernos a través del abordaje de situaciones específicas con una pretendida sensibilidad que resulta artificial y poco creíble. Todo forma parte de un guion que aglutina una carga temática insostenible y no logra desarrollar nada de lo que propone de manera prolija, optando en su lugar por usar las convenciones típicas de las producciones coming-of-age con un tratamiento de manual sin ofrecer sorpresas o toques distintivos. Un recorrido lineal y tedioso por una historia contada hasta la saciedad y mejor resuelta en otras ocasiones.
Otra de las debilidades más notables en esta producción es su elenco compuesto por caras nuevas que no emocionan y entregan actuaciones planas. El cuarteto protagónico presenta un crisol de nacionalidades y perfiles, pero les falta carisma y desparpajo. A excepción de la actriz Marisa Dávila que logra algunos momentos de naturalidad, sus compañeras de reparto se mantienen en un segundo plano y no llegan a destacar con fuerza a lo largo de la historia. El resto del cast se mantiene en la misma línea, con actuaciones que van desde lo exagerado hasta lo inexpresivo, con la notable excepción del actor Johnathan Nieves, a quien vimos en Penny Dreadful: Ciudad de Ángeles y aquí le aporta energía y vivacidad a su personaje Richie Valdovinos, un miembro de los T-Birds originales.
Caos musical
La música es otro aspecto fallido en Grease: Rise of the Pink Ladies. Las canciones compuestas por Justin Tranter se perciben como un homenaje a la época de los 50 y a los ritmos de la cinta de 1978, con el añadido de contar con una nueva versión de la canción Grease en su repertorio, pero lamentablemente nos encontramos con una serie de composiciones olvidables que no poseen el encanto de los temas que capturaron el corazón de toda una generación y contienen mensajes confusos dentro de sus letras, con un acabado panfletario que desvirtúa la intención de realizar reivindicaciones positivas con respecto a ciertos temas actuales y se sienten forzadas se vea por donde se vea.
Algunos aciertos
Dentro de lo poco que se puede rescatar en el lado positivo, tenemos la recreación colorista de los años 50 con un diseño de producción acertado y una fotografía que presenta paletas de colores vibrantes y hace que las imágenes posean un atractivo particular. El vestuario se ajusta a lo esperado en cuanto a la moda de la época y cuenta con algunos diseños que hacen referencia a las prendas icónicas de Grease, mientras que el departamento de maquillaje y peluquería transforma a los actores en adolescentes de antaño con precisión.
En conclusión…
Grease: Rise of the Pink Ladies no aporta nada nuevo a la popular franquicia y contiene una historia donde abundan los clichés, además de personajes estereotipados y canciones que funcionan como panfletos en lugar de avanzar la trama. Poco que celebrar en una producción fallida a toda regla.
