‘La Casa Gucci’, lujo y avaricia

La Casa Gucci es la nueva propuesta del reconocido director Ridley Scott, una cinta que narra la historia de un apellido y un linaje tan ligado a la riqueza y al glamour como a la traición y la avaricia.

Las siete vidas de Ridley Scott

Si hay algo que podemos decir acerca del director de Gladiator, Alien: El Octavo Pasajero o Blade Runner  es que parece estar viviendo un gran momento (una vez más) en su carrera, tras haber estrenado dos grandes películas este mismo año.

Hoy hablaremos de La Casa Gucci, y es importante decir que aunque Ridley sea para muchos demasiado mayor, no ha dejado de tener un apetito cinematográfico voraz. Recordemos que hace unos días habló de sus próximos proyectos para la televisión en los que contará nuevas historias de franquicias como Blade Runner y Alien y de su nueva película Kitbag, protagonizada por Joaquin Phoenix y que adaptará la figura de Napoleon Bonaparte, siendo esta la cinta que filme antes de la ya confirmada secuela de Gladiator. Vamos, que todavía queda Ridley para rato.

En nombre del Padre, del Hijo y de La Casa Gucci

Esmóquines, zapatos, perfumes, cinturones, corbatas… Cuando oímos la palabra Gucci solo podemos pensar en lujo. Una marca italiana que todos conocen pero de cuya oscura historia pocos saben.

Este viernes llega a las salas La Casa Gucci, una cinta basada en la icónica familia. Esta particular casta consiguió llevar a lo más alto y a la vez a lo más bajo a una marca que es sinónimo de clase y elegancia.

La historia comienza cuando sus dos protagonistas se enamoran. Patrizia Reggiani (Lady Gaga) es una humilde joven que vive en Milán. Una noche, Patrizia conoce a Maurizio Gucci (Adam Driver). Este joven es hijo de Rodolfo (Jeremy Irons) y sobrino de Aldo (Al Pacino), ambos descendientes de Guccio Gucci, el fundador de la reconocidísima marca de ropa. Muy pronto Patrizia y Maurizio tratarán de conocer en profundidad el negocio familiar y resolverán algunas cuentas pendientes…

Puñales por la espalda

Basada en la historia real de Patrizia y Maurizio Gucci, La Casa Gucci es una cinta que nos habla de traición y avaricia. Una película que más allá de intentar retratar un desconocido caso, nos habla de lo cruel y ruin que pueden llegar a ser las personas. ¿Hasta dónde estaríais dispuestos a llegar para heredar una inimaginable fortuna? ¿A quiénes venderíais por tener una vida repleta de lujos y oportunidades? De esto trata básicamente La Casa Gucci.

Personalmente no se me ha hecho nada densa a pesar de sus casi 3 horas de duración. Es más, en algunos momentos me daba la sensación de que se hubieran recortado algunas cosas. No nos extrañaría a ninguno ver algún día una versión extendida del director.

En cuanto a su elenco, todos están magníficos. Ya ha habido algunas críticas respecto al acento italiano de Lady Gaga y hacia la actuación de Jared Leto, que hace de Paolo Gucci (el primo de Maurizio). Adam Driver repite con Scott y  sigue demostrando porqué es uno de los actores del momento. Irons y Pacino en sus respectivos papeles también están soberbios. Este último en su salsa, haciendo una vez más de italiano.

Salma Hayek también tiene un pequeño papel, e incluso Tom Ford, el director de Animales Nocturnos y diseñador de moda que además ha estado muy ligado a los Gucci y que curiosamente aparece también en esta cinta representado por Reeve Carney.

La Casa Gucci, una nueva victoria

Todo lo que podamos entender por lujo está muy bien reflejado en esta cinta. El diseño de producción es más que correcto y los temas musicales están muy bien seleccionados. Todo funciona a las mil maravillas. Aunque, volviendo a su duración, podemos entender que haya espectadores a los que se les haga demasiado larga o quienes incluso se pierdan en su desarrollo, que a veces se antoja algo difuso. Sin embargo, no creo que esto sea motivo para no disfrutar de esta obra.

La nueva película de Ridley Scott se estrena en cines esta semana junto a otras producciones como Resident Evil: Bienvenidos a Raccoon City, Lamb, Encanto o La Hija. No obstante, esta nos parece una muy buena opción para disfrutar en las salas.

Puede que la otra reciente cinta del director, El Ultimo Duelo, nos pareciera algo más satisfactoria como experiencia. Pero Ridley Scott nos vuelve a sorprender trayendo una película muy bien llevada. Es evidente que a La Casa Gucci no le podemos reprochar nada. Su reparto y su particular manera de contarnos esta oscura historia que esconde una de las marcas de moda mas glamurosas, son más que suficiente para tenerla muy en cuenta si os apetece ir al cine en los próximos días.