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Críticas de cine

Terrifier 2: así es la película de terror que causa vómitos y desmayos

Damien Leone vuelve a la carga con su icónico personaje Art el payaso en Terrifier 2.

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3.5/5

Damien Leone vuelve a la carga con su icónico personaje Art el payaso en Terrifier 2.

La nueva entrega, mucho más ambiciosa que la primera, se estrenó en el pasado FrightFest de Londres y encantó por igual a crítica y público.

La película está siendo todo un fenómeno en Estados Unidos y supone una de las pocas ocasiones en las que una cinta de estas características se estrena en salas de cine.

La creación de un icono

TRÁILER DE TERRIFIER 2 | CINEDIGM

Cuando uno ve al payaso Art en acción, es consciente de estar asistiendo al nacimiento de un icono. Al igual que Jason Voorhees, Michael Myers, Pinhead o Freddy Krueger, estamos convencidos de que Art ya tiene un hueco entre los grandes villanos del cine de terror a nivel global. Aunque el payaso es mudo, sus dotes expresivas y su capacidad para la mímica nos regalan momentos antológicos. Tiene una mezcla entre sadismo, afán teatral, expresividad corporal y diversión gamberra que lo convierten en un personaje único en el género.

El personaje apareció por primera vez en el cortometraje The 9th Circle en el año 2012. Art era una de las tres criaturas malignas que habitaban un manicomio abandonado. Su creador Damien Leone volvió a recurrir a él para la antología All Hallows’ Eve (2013). Tres historias independientes sobre el payaso asesino que aparecen en una misterios cinta VHS en la noche de Halloween.

Tras esas pruebas iniciales, Art estaba preparado para su primer largo. En Terrifier (2016) David Howard Thornton sustituía a Mike Giannelli en el papel principal, dotando al payaso de la personalidad abrumadora que lo ha convertido en lo que hoy es.

Para estómagos resistentes

Uno tiene que saber bien lo que va a ver. En este caso, la película no es simplemente un slasher al uso, sino uno que pertenece al género del splatter. Es decir, una película de terror explícitamente violenta que no le esconde nada al espectador.

Como sucede siempre en este tipo de películas, ya hay toda una leyenda sobre gente desmayándose y vomitando en los cines. ¿Os suena haber oído lo mismo de otras producciones?

El gore de esta segunda parte es aún más extremo que en la primera así que id preparados y preparadas mentalmente.

Sirva de ejemplo la conversación con el director en el que cuenta como tuvieron que parar el rodaje por culpa de la pandemia y aprovecharon para añadir más y más gore a una de las escenas. Leone y Howard Thornton se compartían ideas a cada cuál más bestia y se animaban a seguir escalando la violencia. Atentos a esa escena. Sucede en la habitación de una de las amigas de la protagonista y es de los más extremo que hemos visto en años.

Terrifier 2 expande el universo

Uno de los aspectos más criticados de la primera parte es su guion simple. La película empieza con un par de amigas que vuelven de fiesta y encuentran a Art en su camino. A partir de ahí empezamos a contar cadáveres porque hay poco más que contar.

Consciente de esas debilidades, Leone se esfuerza por desarrollar más a los personajes en esta segunda parte. Nos cuenta la historia de una familia fragmentada y acompaña a sus miembros mientras explora los orígenes del payaso.

Quizá en esta ocasión se pase de frenada en este apartado porque la película se va hasta las dos horas y media de metraje. Una duración totalmente inusual en este tipo de género. La película no resulta aburrida en absoluto pero sí tenemos la sensación que hay parte del drama familiar que podía haberse contado de una manera más breve.

Se agradece que Leone intente dar un poco más de profundidad a la franquicia pero hay que tener en cuenta que se trata de un slasher y el público acude a las salas para ver a Art en acción. A ver si en la tercera parte el equipo es capaz de encontrar el equilibrio.

El nacimiento de una franquicia

La sesión a la que pudo acudir Soy de cine venía acompañada de un pequeño reportaje de diez minutos tras los títulos de crédito. En él, Leone hablaba con emoción del futuro del personaje. Según sus propias palabras, aún hay mucho que explorar y es verdad que uno sale de la sala con la sensación de que el director se ha guardado varios ases bajo la manga.

Se nos insinúan una serie de cosas relacionadas con la protagonista y su conexión con el payaso pero nunca llegan a confirmarse. Además, se abre un componente más místico y paranormal que transporta la historia a un nuevo terreno de juego. Lo que en la primera parte parecía un hombre perturbado dando rienda suelta a su violenta locura se transforma aquí en una especie de demonio y convierte la historia en un ejemplo más de lucha universal entre el bien y el mal.

Atención a la loquísima escena postcréditos que, lejos de aclarar lo que podemos ver a continuación, nos deja totalmente confundidos.

Nuestra valoración de Terrifier 2

VIDEOCRÍTICA DE TERRIFIER 2 | CANAL DE SOYDECINE

Es innegable que Terrifier 2 supera a su predecesora en todos los apartados y supone un ejemplo de madurez del concepto original. Lo que empezó como la exploración de un personaje y sus límites, ha acabado convirtiéndose en un universo interesante que empieza a dar sus primeros pasos.

A pesar de su larga duración, casi dos horas y media, la película es entretenida y, como no podía ser de otra manera, adquiere sus momentos más notables cuando el payaso Art está en pantalla. El trabajo de caracterización e interpretación de David Howard Thornton hace que podamos hablar ya, sin miedo a equivocarnos, de un icono del slasher a la altura de otros asesinos míticos de la historia del terror.

Se agradece el intento de profundidad que Leone quiere darle a la película, mediante el desarrollo de sus personajes aunque es cierto que este aspecto, escaso en la primera entrega, ahora es algo excesivo.

Con sus virtudes y sus defectos, Art ha llegado para quedarse y como dice el propio director, queda mucho aún por explorar.

Nacido en Las Palmas. Licenciado en filología inglesa. Autor del libro de relatos "Siluetas" y de las novelas "Las sombras que fuimos" y "Los alterados". Cocreador de la página de cine B Entre ninjas y lagartos. Actualmente reside en Maine (EEUU)