Crítica de Thor: Love and Thunder

Esta semana se estrena Thor: Love and Thunder, la última película de Marvel Studios, la cuarta cinta del personaje de Thor, que vuelve a interpretar Chris Hemsworth y a dirigir Taika Waititi, el director de Thor: Ragnarok. La película también está protagonizada por Natalie Portman, Tessa Thompson y Christian Bale y Russell Crowe.

La cuarta parte de Thor vuelve a teletransportanos al mundo fantástico y lleno de colorido que nos presentó su director en la anterior entrega Thor: Ragnarok. Es una película llena de color que mezcla el humor de la anterior cinta con mucha acción y más dramatismo del que parece a simple vista.

Visualmente la película es superior a la tercera ya que se nota que Taika Waititi trabajó con el Stagecraft en The Mandalorian para poderlo aplicar a esta película. Como ya es marca de la casa, Taika Waititi nos presenta varios conceptos locos que pueden llegarnos a sacar un poco de la película. Y es que tenemos una película de Dioses, ciudades que son atracciones turísticas y alienígenas a lo Guardianes de la galaxia.

Demasiado Waititi

Si sois de aquellos a los que les parece que Thor: Ragnarok tiene demasiado humor, tampoco entraréis en Thor: Love and Thunder. Es una película que nos va a contar dos historias muy dramáticas pero tiene mucho humor. A veces, demasiado humor. Si bien es verdad que cuando la película quiere ser dramática consigue serlo, en el resto de momentos es una cinta con demasiado humor. Eso sí, la acción esta vez está bastante mejor dirigida y es una obra con muy buen ritmo.

El amor y la pérdida en Thor: Love and Thunder

El tema principal de la película, como ya se incluye en el título, es el amor. Thor: Love and Thunder nos habla de cómo vivir con el amor no correspondido, de cómo compartir historias vitales con tu ex y de cómo podemos vivir con la pérdida de los seres queridos. La última vez que vimos a Thor en Endgame estaba deprimido por la cantidad de personas que había perdido. Pues bien, ahora lo recuperaremos en ese punto de búsqueda de paz interior y de volver a recordar quién es realmente.

Está claro que aquí es donde entra Jane Foster, su ex. Taika Waititi se va a dedicar a contarnos cómo terminó esa relación y cómo están los personajes antes de que se reencuentren.

El personaje de Gorr representa la pérdida, el odio y el resentimiento. Un buen villano que nos brinda Christian Bale y que es una pena que no dure más. Creo que podría haber sido un buen antagonista si nos lo hubieran presentado antes o si ya tuviéramos más panteones aparte del nórdico y el egipcio en el universo Marvel.

Conclusión

Thor: Love and Thunder es una película divertida, que pedía un poco más de dramatismo del que ha acabado teniendo pero que se hace muy entretenida y sigue haciendo evolucionar al personaje principal. Ya sabíamos que iba a ser una película de Taika Waititi, y dentro de lo que cabe es menos loca de lo que parece a simple vista.