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Críticas de cine

‘Till: el crimen que lo cambió todo’, una película necesaria

Un intenso drama construido sobre una trágica historia real.

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3.5/5

La directora estadounidense nacida en Nigeria, Chinonye Chukwu dirige Till: el crimen que lo cambió todo, un intenso drama construido sobre una trágica historia real.

La película se estrenó en el pasado Festival de Nueva York y recibió numerosas alabanzas por el trabajo de su actriz protagonista Danielle Deadwyler.

La cinta tiene previsto estrenarse en las salas de cine españolas el próximo 24 de febrero.

Till y la lucha por los derechos civiles

TRÁILER DE TILL | UNIVERSAL PICTURES

La película de Chukwu lleva por título el apellido de su protagonista. Mamie Elizabeth Till-Mobley o Mamie Till nació en el Mississippi de los años 20. Al igual que muchos afroamericanos de su época, la familia decidió mudarse a Illinois cuando ella tenía solo dos años. Un período en el que más de seis millones de negros estadounidenses escaparon de un sur hostil hacia diferentes estados del norte en busca de una vida mejor. Esta masiva reubicación pasó a los libros de historia como La gran migración negra.

El verano en el que el único hijo de Mamie, de catorce años, pidió visitar a su familia en el sur del país, lo cambió todo. No solo para la familia Till, sino también para la lucha en favor de los derechos humanos en el país.

Para muchos, el ejemplo de Mamie y su capacidad para convertir el suceso trágico en un asunto de estado fue la llama que prendió la mecha del activismo afroamericano en Estados Unidos.

El acertado foco de Till: el crimen que lo cambió todo

Hay muchas formas de afrontar una historia basada en hechos reales. Los puntos de vista y las implicaciones son tan variadas que es difícil saber dónde poner el foco. Chinonye Chukwu lo tuvo claro desde el principio. La única cineasta negra en ganar en Sundance quería centrar su historia en la lucha de una mujer coraje más que en el drama de su pérdida.

El guion de Michael Reilly, Keith Beauchamp y la propia Chinonye Chukwu podría haberse inclinado hacia la tragedia. Merodear en círculos sobre la violenta muerte de Emmet buscando el morbo o el impacto fácil. Afortunadamente no lo hace. Ni siquiera se molesta en retratar a unos supremacistas blancos que se retratan por sí mismos. Estos, apenas aparecen durante la película.

La cámara solo le regala unos minutos a Carolyn Bryant, la mujer cuyo testimonio desembocó en el asesinato. Un papel complicado que interpreta con solvencia la actriz Haley Bennett. Complicado por todo lo que su personaje implica y complicado porque la propia Bryant sigue aún viva.

El papel de Danielle Deadwyler

El centro narrativo de la película lo ocupa Danielle Deadwyler. Una viuda capaz de enfrentarse a una sociedad donde el racismo campa a sus anchas en todas las instituciones.

Hasta ese momento, los habituales linchamientos de afroamericanos en el sur de Estados Unidos no solo quedaban impunes, sino que pasaban desapercibidos. Como mucho, llegaban a las noticias locales y eran consumidas con la pasividad que solo merece lo cotidiano. Mamie Till convirtió la muerte de su hijo en un debate nacional gracias a su fuerza y perseverancia.

Todo eso se percibe en la actuación de Deadwyler. Un papel que lidia con todo un rango de emociones. Desde el derrumbe cercano a la depresión hasta la entereza pasando por la contención. La actriz combina momentos en los que la expresión de sus emociones se concentra en el simple temblor de un labio con otros donde da rienda suelta a su sufrimiento en forma de llanto descontrolado. El registro de Deadwyler es tan amplio que no nos sorprendería verla nominada en la próxima edición de los Oscars.

El diseño de producción

Todo sucede en los años 50 de unos Estados Unidos donde la diferencia entre el sur y el norte era aún más evidente que en la actualidad.

El trabajo del departamento de vestuario y del diseño de producción en este tipo de películas es siempre complicado. Requiere de una investigación previa exhaustiva y más si, como en este caso, se trata de representar hechos y personas reales.

En Till: el crimen que lo cambió todo, ningún coche de atrezo tiene polvo, ningún papel pintado en la pared tiene manchas, los muebles no tienen ningún desperfecto, todos los vestidos parecen recién planchados o salidos de la tienda y así una cosa tras otra. Todo es demasiado bonito. Cada uno de los elementos es tan pulcro y está tan cuidado que, a veces, el conjunto resulta casi irreal.

El manejo de las emociones

Soy consciente de que esta es la parte más subjetiva de mi crítica y estaré encantado de leer vuestra opinión al respecto pero Till no consiguió emocionarme. Fui al cine preparado con mi paquete de pañuelos consciente del drama al que estaba a punto de enfrentarme.

La historia es durísima y tiene todos los elementos necesarios para impactarnos a nivel emocional: discriminación, injusticia, violencia, asesinato e infancia. Más si tenemos en cuenta que se trata de un hecho real.

Un servidor llora hasta con la música de discoteca y sin embargo, Till no provocó en mí la reacción que esperaba. Quizá sea precisamente por esa anticipación, por ir al cine muy preparado y consciente de lo que iba a ver. Quizá porque conocía bien la historia de antemano o porque el asesinato ocurre tan pronto que no nos da tiempo a empatizar de manera plena con el personaje.

Nuestra valoración de Till: el crimen que lo cambió todo

VIDEOCRÍTICA DE TILL: EL CRIMEN QUE LO CAMBIÓ TODO | CANAL DE SOYDECINE.COM

Till: el crimen que lo cambió todo es una película necesaria y el enfoque que hace Chinonye Chukwu de la historia es el más acertado. La directora huye de sensacionalismos y pone la historia a los pies de una madre coraje y su lucha por hacer justicia.

Es necesario recordarle de vez en cuando a la sociedad estadounidense de dónde viene y dónde está. Han pasado setenta años desde los acontecimientos que narra la película y, aunque ha habido avances evidentes, aún queda mucho por recorrer.

Los grandes logros sociales son la culminación de pequeñas historias personales de lucha y sin duda, la de Mamie Till lo es. La importancia de lo que se cuenta y la necesidad de compartirlo con las nuevas generaciones justifica, de sobra, la existencia de esta película y la actuación de Danielle Deadwyler vale, también de sobra, el precio de la entrada.

Nacido en Las Palmas. Licenciado en filología inglesa. Autor del libro de relatos "Siluetas" y de las novelas "Las sombras que fuimos" y "Los alterados". Cocreador de la página de cine B Entre ninjas y lagartos. Actualmente reside en Maine (EEUU)